Los trillizos del rugby valenciano

Armando y Cristina jamás pensaron después de tener a su hijo Pau hace 21 años, que cuatro años más tarde y fruto de su segundo embarazo iban a llegar trillizos. Como tampoco que estos iban a compartir desde los nueve años una misma afición por el rugby que iba a llevarles a la selección española sub-17, con la que al principio fueron convocados Joan y Eduard, y a los que se unió Marc desde la pasada Semana Santa. Un extraño caso en el mundo del deporte, acostumbrado a ver sagas de hermanos, también algún ejemplo de gemelos, pero casi nunca de trillizos, y menos de la misma disciplina. Eduard, Joan y Marc Calatayud repiten por segunda vez en la lista de Miguel Velasco para la concentración del 11 al 14 de abril en Madrid, preparatoria para el Torneo Internacional Cross Border, que España disputará en Holanda del 24 al 28 de abril, y en el que debutará ante Suiza, y posteriormente contra la República Checa o los anfitriones, quizá luchando por el título. 

Sería todo un premio para estos tres jóvenes nacidos en Valencia pero afincados en Cullera, que cumplirán 17 años el próximo 25 de abril, en pleno torneo, y que militan en la escuela del Cullera R.C., dentro del proyecto Inter que aglutina jugadores de la capital de la Ribera Baixa, de Alzira y de Tavernes. Allí se forman en este «deporte de caballeros» hasta que cumplan los 18 y puedan dar el salto a la categoría Senior.

Aunque de niños jugaban al tenis y hacían natación, como su hermano Pau, pronto se desmarcaron al descubrir el rugby por un amigo de la familia. «Nos lo sugirió y al principio no hicimos mucho caso», explica Joan, que juega de primera línea, «pero cuando lo probamos nos gustó tanto que dejamos lo otro para dedicarnos en exclusiva». Les ayudó la tradición que por este deporte hay en Cullera, con más de un centenar de licencias, y el apoyo de su hermano mayor, estudiante de Ciencias de la Actividad Física y el Deporte y al mismo tiempo su preparador cuando no hay partidos.

«No es muy corriente que tres hermanos se dediquen al mismo deporte, y mucho menos que estos sean trillizos», admite Eduard, que juega de apertura, y para el que esta triple convocatoria «es una recompensa al trabajo de todo el año». «Siempre tienes el objetivo de llegar a la selección, pero en lo que te centras es en tu club, esperando que llegue la oportunidad. Vamos a este entrenamiento y si hay suerte celebraremos nuestro cumpleaños en Holanda», añade.

Marc, segunda línea y el recién llegado a la sub-17 del 'XV del León', como internacionalmente se conoce al combinado nacional, reconoce la «importancia de estos torneos y del rugby a 7, olímpico a partir de Río 2016, para motivar a los jugadores» ante la dificultad de alcanzar el nivel de las grandes selecciones en categoría absoluta.

Sin embargo, los tres tienen claro quiénes son sus referentes, como valencianos que son. «César Sempere es todo un ejemplo para nosotros, alguien que ha llegado a la absoluta y que ha jugado en equipos importantes en Francia e Inglaterra», dice Joan. «Y Edu Sorribes», añade Marc, «que está jugando al más alto nivel en La Vila, y antes en el CAU».

Saben que en el futuro tendrán donde elegir, con equipos como estos, o Les Abelles y el Tecnidex, pero por ahora se conforman con completar su formación en el Inter, que este fin de semana, si no se aplaza, jugará sin sus trillizos la vuelta de semifinales de la Liga Territorial Cadete ante el CAU, tras caer 19-13 en la ida. «Tienen un gran espíritu de club, y recorrido aún con el Inter», matiza Armando, que ejerce a la vez de padre y delegado de una entidad «que en dos o tres años puede estar entre las mejores autonómicas». «Pero yo aspiro a que se lo pasen bien y disfruten con lo que hacen», sentencia.

Fuente: J.V. Belda (www.superdeporte.es)