En una mañana soleada y calurosa, la primera media hora fue de dominio local. Aunque el kiwi Thompson pusiera una primera ventaja visitante a los 4 minutos. Golpe de castigo que -desde más lejos- no pudo responder Nin en el 8', pero sí en el 12' (3-3). Kirikiri y González por los azules veían sendas amarillas, y el paquete abejorro dominaba con mucho la melé; sin embargo, algunas irregularidades en el scrummage les privaban de puntuar, como por ejemplo en una buena ocasión de ensayar a 5 metros (min.22). Pero los catalanes estaban maduros, y la delantera valenciana los martilleaba. En el 31' logran entrar de maul hasta la cocina azul. Try de Bartolo Durand complementado por Nin (10-3). Les Abelles no supieron congelar el partido. Con un Pantera desesperado en la banda, se metieron en un ritmo que no les convenía, con excesivas infracciones dentro de su 22. Thompson acertaba por partida doble, en el 36' y al filo del descanso, acercando a los suyos hasta el 10-9. Darle vida al rival antes del descanso iba a salirle caro a Les Abelles.
El partido se iba a romper en los primeros compases de la reanudación. Para empezar, siguió la tónica: muy pronto a Thompson se las ponían como a Fernando VII. Cerca y centraditas. Diana a la primera para voltear el tanteador (10-12, min. 41). Fallo a la segunda desde posición más esquinada. Ahí arranca la jugada clave del partido. Tommy ha conseguido conjurar a los suyos, Les Abelles no salen de la cueva con el saque y Marcos Poggi acaba defendiendo con muchos apuros. En la melé defensiva a 5, Manolo Chicharro dictamina sucesivos golpes de castigo de los jugadores locales. Disfrazado de pistolero, va disparando tarjetas amarillas a Nin, Mercanti y Cornei, hasta dar ensayo de castigo para Sant Boi.
Repasando el cronograma del partido, parece increíble que en los siguientes minutos, Les Abelles no sólo no encaje más puntos, sino que con tres hombres menos sea capaz de alcanzar la 22 catalana. Fernando Domínguez ha pasado de 9, y el pundonor de los centros Coco Villalba y Lucas Poggi obtiene un golpe de castigo a favor. Nin vuelve del sin bin justo para poner el 13-19 en el minuto 54. Les Abelles no están muertos pero sí tocados el desgaste de la inferioridad, y aún más el vaivén de delanteros al que obligan las expulsiones. Su melé se descompone, aunque el Pantera intenta apuntalarla, renovando entre el caos casi todo el paquete. Por su parte, Thompson ha leído por dónde puede hacer metros y toma la inciativa buscando el centro, con la ayuda de Aubanell y Martín. La línea local bastante hace con tapar las vías de agua. En ataque no genera peligro: sin dinamita, sin dirección, sin abrir ni un solo balón, con un Marcos Poggi muy dubitativo y Domínguez aburrido en el ala. Nin no consigue ponerla en juego, y el partido se parece a muchos de la pasada temporada. Un equipo competitivo pero sin capacidad resolutiva, obligado a apretar delante y padecer detrás.
La picardía de Puigbert, sacando rápido una penalidad a 5, deja a Richmond en bandeja el segundo ensayo catalán. Transforma Thompson para 13-26, min.57. Es cuando "Bocha" se retira del campo entre aplausos. Cornei sale para asegurar la touche sobre Parra y Durand, y Les Abelles siguen sin entregar la cuchara. Varias acometidas que arrastran de nuevo a la Santboiana, obligan a Chicharro a sancionarles con try penal (20-26). A los aficionados desplazados desde el Llobregat no les llega la camisa al cuerpo: Bera Bera ya gana a Gernika y Les Abelles vienen achuchando, a tiro de ensayo. Pero no les durará mucho el desasosiego. Mala touche local cerca de su línea, avant de la Santboiana. Otra melé con introducción propia, en la Chicharro vuelve a varear a los locales. Golpe de castigo frente a palos. La metralleta Thompson rescata a Tommy del peligro inminente (20-29, min. 68).
En lo que resta, los locales ya no darán muestras de poder ir a por la victoria. Se ven martirizados por unos tres cuartos contrarios que encuentran un chollo por el centro de la defensa local, y por una buena labor de Corbacho desde la touche. El premio es un último ensayo del flanker Kirikiri.
Les Abelles bajan el telón sin quitarse el sabor, más agrio que dulce, de una temporada en la que nunca abandonaron el farolillo rojo. La vida sigue, el rugby sigue. Con proyecto, con gente, con ilusión. Por más que el día a día haya sido de angustia permanente (cuando no directamente de pesadilla), la experiencia en Divisón de Honor ha traído la alegría a este pequeño club. Y aunque el pésimo tono de esta última temporada parezca querer desmentirlo, el balance es claramente positivo. Tanto que, después de probar la DH, a casi todos cueste hacerse a la idea de volver a la B. En el trabajo y la sensatez están las claves para invertir la tendencia derrotista, y hacer posible un florecimiento ganador que devuelva a Les Abelles a donde tanto le ha gustado estar.
La UE Santboiana resuelve in extremis otro año gris (oscuro), en el que como muchos clubes hubo de recurrir a parches y soluciones de urgencia. En la 2010-11 se les volverá a ver por Valencia, esta vez contra el CAU.
Fuente: Prensa Les Abelles R.C.
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