Hace ya ocho meses, a mediados del mes de septiembre del año pasado, el Akra Barbara R.C. asumía el reto de continuar una temporada más en Primera Territorial Valenciana, a pesar de las numerosas bajas que debía aceptar el equipo por motivos familiares y laborales.El camino no iba a ser fácil, pero un sentimiento afloraba en el seno del grupo, "era posible competir y conseguir la permanencia". Las incorporaciones que se fueron sucediendo a lo largo de los meses, permitieron soñar al equipo. Este domingo, en la última jornada de liga, ese reto de permanencia aún es posible.
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En el camino hasta llegar aquí, muchas dificultades, muchas contrariedades, muchas oportunidades perdidas de presentarse a este último partido dependiendo de uno mismo. Pero al menos, siguen vivos.
Sin duda, el partido perdido en Valencia antes el Ciencias, fue un duro revés para el club alicantino en sus aspiraciones de seguir un año más en la máxima categoría del rugby valenciano. Si bien, lejos de bajar los brazos, en los dos partidos siguientes, previos al de este domingo, el Akra sacó casta y orgullo, realizando un enorme partido ante el líder, C.R. La Vila "B", donde les faltó suerte para dar la campanada, y ganando al San Roque C.R. con solvencia y claridad.
Un factor ha sido determinante para que este equipo no haya podido presentar en cada partido sus mejores credenciales: las lesiones. Esta temporada, de manera especial, las lesiones se han cebado con un equipo, que más allá de que jugadores jugaran o no cada partido, no ha podido contar con todo el colectivo para entrenar semana tras semana con todas las garantías.
El domingo ante Tavernes, el Akra no tiene otra salida que ganar con el bonus ofensivo, con el fin de apurar todas las combinaciones que se pueden dar en un día que será frenético a la misma hora en cuatro campos de rugby de la geografía valenciana.
En el camino hasta llegar aquí, muchas dificultades, muchas contrariedades, muchas oportunidades perdidas de presentarse a este último partido dependiendo de uno mismo. Pero al menos, siguen vivos.
Sin duda, el partido perdido en Valencia antes el Ciencias, fue un duro revés para el club alicantino en sus aspiraciones de seguir un año más en la máxima categoría del rugby valenciano. Si bien, lejos de bajar los brazos, en los dos partidos siguientes, previos al de este domingo, el Akra sacó casta y orgullo, realizando un enorme partido ante el líder, C.R. La Vila "B", donde les faltó suerte para dar la campanada, y ganando al San Roque C.R. con solvencia y claridad.
Un factor ha sido determinante para que este equipo no haya podido presentar en cada partido sus mejores credenciales: las lesiones. Esta temporada, de manera especial, las lesiones se han cebado con un equipo, que más allá de que jugadores jugaran o no cada partido, no ha podido contar con todo el colectivo para entrenar semana tras semana con todas las garantías.
El domingo ante Tavernes, el Akra no tiene otra salida que ganar con el bonus ofensivo, con el fin de apurar todas las combinaciones que se pueden dar en un día que será frenético a la misma hora en cuatro campos de rugby de la geografía valenciana.
Durante toda la semana, el cuerpo técnico ha insistido en "la necesidad de acabar el último partido de la temporada con la sensación de haber cumplido con nuestro trabajo, que es el de ganar al Tavernes. Y a partir de ahí, esperar que la suerte nos venga de cara".
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